Casi nunca tenemos en cuenta la velocidad con la que hacemos las repeticiones y ya con el cansancio ni tan siquiera el movimiento. Sin embargo, son dos cosas muy importante. Cuando entrenas con peso no todo es tan fácil ni tan obvio como parece a simple vista. No se trata de levantar peso como si de una grúa hidráulica se tratara. Es tu cuerpo y haz de saber como siempre decimos que si lo engañas o lo maltratas él lo sabrá.
Ejercicios aeróbicos:
Cuando hacemos ejercicios aeróbicos te puedes esforzar mucho o poco, dependiendo de lo que quieras conseguir, por ejemplo: Perder peso o simple mantenimiento. En ambos casos la intensidad será distinta, aunque realicéis el mismo tipo de ejercicio. Y es aquí donde la velocidad con la que haremos las repeticiones entran y puntúan. Una intensidad moderada ocuparía entre un 50% y 70% de tu frecuencia cardíaca máxima. Una intensidad media alta (vigoroso) ocuparía entre un 70% y 85% de tu frecuencia cardíaca máxima. Así que en el caso de los ejercicios aérobicos deberemos estar altamente pendiente de la frecuencia cardiaca que será la que nos dé la velocidad con la que deberemos hacer las repeticiones. Para saber en que zona de pulsaciones te encuentras os dejo aquí un enlace donde os explicamos como hacerlo (https://experienciawellnes.blogspot.com/2014/05/como-puedo-medir-mi-ritmo-cardiaco-sin.html). No obstante la velocidad de las repeticiones deberían ir acorde con lo que se quiere conseguir. Normalmente en mi caso entreno con música y según la intensidad con la que tenga que entrenar me pongo una lista de reproducción u otra. Y el ritmo de la música es el que marca el movimiento.
Ejercicios anaeróbicos:
Cuando lo que estamos buscando es desarrollar masa muscular, no importar el tiempo que lleves entrenando sea mucho o poco. Los entrenamientos con repeticiones lentas son el camino a seguir. Y digo las repeticiones lentas, porque estás harán que tus músculos pasen mucho más tiempo bajo tensión. Y es aquí donde entra el termino de las repeticiones negativas y positivas. Aunque la mayoría asume las negativas como un trabajo individual ya que las positivas son el ejercicio en si mismo (levantamiento del peso) Podríamos decir que cuando levantamos peso estamos haciendo la fase positiva del ejercicio y cuando devolvemos el peso a la posición inicial antes de iniciar el movimiento es la fase negativa. Ambas fases deberían durar aproximadamente entre 7 y 10 segundos por cada repetición. Cuando realizamos las repeticiones de esta manera no solo mantendremos el musculo en cuestión más tiempo bajo tensión, sino que evitaremos la ayuda que nos dará la propia inercia del movimiento. Además, al prolongarse el ejercicio en el tiempo la respiración pasará a ser un factor clave porque, aunque terminemos agotados las series, la fatiga será menor.
Repeticiones rápidas:
Las series de repeticiones “rápidas”, las suelo hacer con poco peso y su única función en mi caso particular es quemar grasa y mantener la movilidad y elasticidad de los músculos en cuestión. Que siempre complemento con su respectiva serie de estiramiento. No suelo involucrar músculos pequeños en este tipo de series. En todo caso os recomiendo que visitéis a un profesional, para que según vuestra necesidad os haga un plan de acorde ya que estás son las bases, pero hemos de tener en cuenta que cada cuerpo es un libro.